El equipo visitante tuvo acceso directo a esta fase de grupos, por lo que disputará su primer partido en esta competición. Éste es un equipo más fuerte cuando juega en casa, ya que en los últimos 30 partidos registra 3 victorias, 2 empates y 10 derrotas como visitante; contra 9 victorias, 1 empate y 5 derrotas en su estadio. El equipo llega a este partido después de una derrota en casa con la Serbia por (0‑3). En los últimos 5 partidos fuera de casa, Suecia ganó 1, empató 1 y perdió 3. La solidez defensiva no ha sido su punto fuerte, ya que sufrió goles en 8 de los últimos 10 partidos, pero su ataque ha marcado con regularidad, ya que marcó goles en 8 de los últimos 10 partidos. En 11 partidos, sufrió el primer gol 6 veces y sólo logró darle la vuelta al marcador una vez.
Suecia llega a este partido tras una derrota, por 0-3, en un amistoso frente a Serbia. El equipo dirigido por Jon Dahl Tomasson se caracteriza por jugar en un tradicional 4-4-2, privilegiando las transiciones rápidas y los ataques por las bandas. En el esquema táctico, los dos jugadores responsables de la misión ofensiva serán Alexander Isak y Viktor Gyökeres. En el mediocampo, Dejan Kulusevski juega un papel crucial, coordinando las jugadas y asegurando una conexión eficaz entre defensa y ataque. Todos los atletas están disponibles para este juego.