El equipo de la casa llega a esta 2ª jornada después de una derrota en su estreno en esta fase de grupos, frente al Brasil, por (5‑1). Este es un equipo más fuerte cuando juega en casa, ya que en los últimos 30 partidos registra 2 victorias, 1 empate y 12 derrotas como visitante; contra 5 victorias, 2 empates y 8 derrotas en su estadio. En los últimos 9 partidos en casa Bolivia registra 4 victorias, 1 empate y 4 derrotas. La solidez defensiva no ha sido su punto fuerte, ya que sufrió goles en 9 de los últimos 10 partidos, y su ataque no está en un buen momento, ya que no marcó goles en 7 de los últimos 10 partidos. En sus partidos en casa hay una tendencia para haber goles, ya que 6 de sus últimos 9 partidos terminaron con Más de 2,5 goles. Este es un equipo que rara vez marca primero y solo consiguió abrir el marcador en 3 de sus últimos 15 partidos, de esos 3 llegó al descanso con ventaja en 2 y ganó al final de los 90′ en todos de ellos. En 15 partidos, nunca consiguió remontar el marcador en los 11 partidos en los que sufrió el primer gol.
Enfrentar a Argentina siempre es un desafío, pero Bolivia sabe que jugar en casa puede ser una ventaja en este duelo. La selección boliviana necesita aprovechar el factor local y adoptar un enfoque ofensivo y decidido en el campo para buscar un resultado positivo ante un rival tan fuerte como Argentina. Conseguir puntos en casa es crucial para sus esperanzas en las eliminatorias.