Después de 4 victorias, 2 empates y 1 derrota, el equipo de la casa está en la 3.ª posición, con 13 puntos conquistados. En el último partido, empató fuera con el Oxford United por (0‑0), después de haber ganado en casa en el partido anterior, en un partido contra el Portsmouth, por (2‑1). En los últimos 10 partidos en casa el Burnley registra 3 victorias, 3 empates y 4 derrotas. Su ataque ha marcado con regularidad, ya que marcó goles en 5 de los últimos 7 partidos en esta competición. En sus partidos en casa hay una tendencia para haber goles, ya que 18 de sus últimos 18 partidos terminaron con Más de 1,5 goles. En 15 partidos, sólo consiguió remontar el marcador una vez en los 7 partidos en los que sufrió el primer gol.
El Burnley llega a este duelo tras conseguir un empate 0-0 en el viaje a Oxford. El equipo de la casa suele actuar en un clásico 4-3-3, privilegiando las transiciones rápidas y los ataques por las bandas. En este diseño táctico, los atacantes que deben destacarse son Jeremy Sarmiento, Luca Koleosho y Lyle Foster. En el mediocampo, se espera que Josh Cullen, Josh Brownhill y Hannibal Mejbri desempeñen un papel clave. Una de las mayores fortalezas del Burnley radica en su capacidad para crear oportunidades de gol, aprovechando las habilidades individuales de sus jugadores. Fuera de este partido están Nathan Redmond, Mike Trésor, Jordan Beyer, Aaron Ramsey, Hannes Delcroix y Manuel Benson, todos con problemas físicos.