El equipo visitante llega a esta 2ª jornada después de una victoria en su estreno en esta fase de grupos, frente al Slovan Bratislava, por (5‑1). En el último partido que disputó, para la Premier League, ganó fuera al St. Johnstone por (0‑6). En los últimos 10 partidos fuera de casa el Celtic ganó 9 y empató 1. Su ataque ha marcado con regularidad, ya que marcó al menos un gol en cada uno de los últimos 10 partidos. Hay una tendencia para haber goles en sus partidos, ya que en 26 de sus últimos 27 partidos como visitante hubo Más de 1,5 goles y en 20 de los últimos 27 hubo Más de 2,5 goles. Este es un equipo que no suele tener dificultades a la hora de abrir el marcador: marcó el primer gol en 14 de los últimos 15 partidos, de esos 14 llegó al descanso en ventaja en 11 y consiguió mantener la ventaja hasta el final. Final de los 90′ en 13.
El Celtic llega a este partido tras una gran victoria, por 0x6, en la visita al St. Johnstone, en un partido por el campeonato escocés: los goles del equipo fueron marcados por Daizen Maeda, Kyogo Furuhashi (2), Paulo Bernardo, Adam Idah y Callum McGregor. Es importante destacar que, en su debut en la Liga de Campeones, el equipo escocés obtuvo una contundente victoria sobre el Slovan, por 5×1. Al igual que el Borussia Dortmund, el entrenador Brendan Rodgers también adopta una formación 4-3-3, centrándose en movimientos rápidos a través de pases cortos para avanzar en el campo. Sin embargo, es probable que la selección escocesa opte por un enfoque más cauteloso dada la fuerza y calidad de sus oponentes. Los tres atacantes previstos son Daizen Maeda, Kyogo Furuhashi y Nicolas Kuhn. Todos los atletas están disponibles para este juego.