El equipo visitante llega a esta 2ª jornada después de un empate en su estreno, frente al Tottenham Hotspur, por (1‑1). Este es un equipo que mantiene su rendimiento cuando juega fuera de casa, ya que en los últimos 30 partidos registra 6 victorias, 2 empates y 7 derrotas como visitante; contra 8 victorias, 2 empates y 5 derrotas en su estadio. En los últimos 10 partidos disputados como visitante para todas las competiciones, el Leicester ganó 4, empató 1 y perdió 5. La solidez defensiva no ha sido su punto fuerte, ya que sufrió goles en 8 de los últimos 10 partidos. En 15 partidos, sólo consiguió remontar el marcador una vez en los 9 partidos en los que sufrió el primer gol. Hay 1 periodo en destaque en los últimos 20 partidos como visitante para todas las competiciones: sufrió 11 de sus 26 goles entre los minutos (76'‑90').
El Leicester City llega a este partido con un empate en casa, por 1-1, frente al Tottenham: el único gol del equipo lo marcó Jamie Vardy. El equipo visitante opta por jugar en un tradicional 4-3-3, en el que los tres jugadores más adelantados son Bobby De Cordova Reid, Issahaku Fatawu y Jamie Vardy. Cuando ingresa al sector ofensivo, suele intentar canalizar su ataque por el lado derecho, aprovechando la profundidad que ofrece el lateral James Justin. Fuera de este partido están Patson Daka y Conor Coady, ambos lesionados.