Después de 1 victoria, 2 empates y 1 derrota, el equipo de la casa está en la 11.ª posición, con 5 puntos conquistados. En el último partido, perdió fuera frente al Le Havre por (3‑0), después de haber ganado en casa en el partido anterior, en un partido contra el Lille, por (4‑1). Este es un equipo afectado por el factor casa, más fuerte cuando juega en casa, ya que en los últimos 30 partidos registra 1 victoria, 6 empates y 8 derrotas como visitante, con 13 goles marcados y 27 sufridos, contra 7 victorias, 5 empates y 3 derrotas en casa, con 24 goles marcados y 14 sufridos. El Lorient ha ganado 5, empatado 3 y perdido 2 de sus últimos 10 partidos en casa en todas las competiciones. El equipo permitió goles a su rival en 3 de los últimos 4 partidos que disputó en esta competición, por lo que no ha sido muy fuerte defensivamente. En 15 partidos, nunca consiguió remontar el marcador en los 5 partidos en los que sufrió el primer gol.
El Lorient llega a esta jornada desmotivado, tras una derrota fuera de casa, por 3-0, en Le Havre. El club local suele actuar en un sistema táctico 5-2-3, privilegiando un estilo de juego más ofensivo, atacando por las bandas. El Lorient es un equipo al que le gusta jugar en su mediocampo, con el objetivo de moverse rápidamente para atacar y sorprender a la defensa “enemiga”. En este esquema, los dos jugadores responsables por ocupar la zona del mediocampo son Julien Ponceau y Laurent Abergel, con énfasis en este último, que es el “director” de su equipo. Para este partido, el técnico Régis Le Bris deberá estar muy contento de tener todas las piezas disponibles.
