El equipo visitante se encuentra actualmente en la 16ª posición, con 22 puntos conquistados, después de 5 victorias, 8 empates y 8 derrotas. En el penúltimo partido, perdió fuera frente al América Mineiro por (3‑1). En el último partido, empató en casa frente al Paysandú por (1‑1). Este es un equipo afectado por el factor casa, más fuerte cuando juega con el apoyo de su afición, ya que en los últimos 30 partidos registra 3 victorias, 2 empates y 10 derrotas como visitante, con un total de 14 goles marcados y 31 concedieron. En casa, obtuvo 5 victorias, 8 empates y 2 derrotas, con un total de 15 goles marcados y 10 sufridos. En sus últimos 10 partidos como visitante para el campeonato el Botafogo SP registra 2 victorias, 2 empates y 6 derrotas, por lo que conquistó 8 puntos en 30 posibles.
Para esta competición, no ganó ninguno de los últimos 5 partidos como visitante. La solidez defensiva no ha sido su punto fuerte, ya que sufrió goles en 9 de los últimos 10 partidos, pero su ataque ha marcado con regularidad, ya que marcó goles en 9 de los últimos 10 partidos para esta competición. Hay una tendencia para haber goles en sus partidos como visitante, ya que 9 de los últimos 10 partidos que disputó para esta competición terminaron con Más de 1,5 goles. En 21 partidos en esta competición, sufrió el primer gol 11 veces y nunca consiguió la remontada.
Por otro lado, el Botafogo viene atravesando dificultades por las fluctuaciones, coqueteando con la zona de descenso. Jugando fuera de casa ante un rival difícil, el técnico debe centrarse en proteger el sistema defensivo. Se espera una actitud reactiva, con el equipo explorando contraataques en un intento de sorprender al Mirassol y lograr un resultado positivo.
