Este es un equipo que se ve influenciado por el factor casa, siendo más fuerte cuando juega con el apoyo de sus aficionados, ya que en los últimos 30 juegos registra 4 victorias, 5 empates y 6 derrotas como visitante, con un total de 16 goles marcados y 23 recibidos. En casa, logró 12 victorias, 1 empate y 2 derrotas, con un total de 38 goles marcados y 13 recibidos. En su último juego, para la Serie A TIM, ganó al Empoli fuera por (0-1). En los últimos 5 partidos como visitante en la Liga Europa, la Roma ha registrado 3 empates y 2 derrotas.
En esta competencia, no ha podido ganar ninguno de los últimos 5 juegos fuera de su estadio. El equipo ha permitido goles al adversario en 7 de los últimos 10 juegos, lo que indica que no ha mostrado gran solidez defensiva, pero su ataque ha marcado con regularidad, concretando en 8 de los últimos 10 juegos en esta competencia. En 11 juegos en esta competencia, ha logrado remontar el marcador en 2 de los 5 juegos en que recibió el primer gol.
La Roma llega a este partido motivada después de una victoria por 0-1 en su visita al estadio del Empoli, donde el único gol del encuentro fue anotado por Matías Soulé. En el partido de ida de los octavos de final de la Liga Europa, los visitantes vencieron al Athletic Bilbao por 2-1. El equipo italiano debe jugar en un sistema táctico 3-4-3, con la intención de aprovechar los contraataques. En esta formación, los tres hombres que deberían adoptar una postura más ofensiva son Artem Dovbyk, Matías Soulé y Stephan El Shaarawy. El entrenador Claudio Ranieri no puede contar con Zeki Çelik, lesionado, y todavía tiene en duda a Paulo Dybala.