El equipo local llega a esta fase de la Coppa Italia (Semifinales) tras haber disputado eliminatorias anteriores contra: Juventus, Fiorentina, Torino y Catanzaro. Llega a este encuentro después de un empate fuera de casa con el Como (1‑1). El Empoli ha ganado 1, empatado 2 y perdido 7 de sus últimos 10 juegos en casa en todas las competiciones.
En esta competencia, no ha perdido en 4 partidos. La solidez defensiva no ha sido su punto fuerte, ya que ha concedido al menos un gol en cada uno de sus últimos 4 juegos, pero su ataque ha sido regular, marcando al menos un gol en cada uno de sus últimos 4 partidos en esta competición. En sus juegos en casa hay una tendencia a pocos goles, ya que 10 de sus últimos 23 partidos han terminado con menos de 1.5 goles y 15 de 23 han terminado con menos de 2.5 goles. En 15 encuentros, recibió el primer gol 10 veces y nunca logró darle la vuelta al marcador. En los últimos 19 partidos en casa en todas las competiciones hay 1 periodo destacado: marcó 5 de sus 11 goles entre los minutos (46’‑60′).
El Empoli llega a esta ronda después de un empate 1-1 en su visita al estadio del Como, válido para la Serie A. Vale la pena señalar que los anfitriones llegan a esta fase de la Copa de Italia tras eliminar a la Juventus en la ronda anterior. El equipo local suele jugar en un 3-4-3, donde las tres piezas más adelantadas son Sebastiano Esposito, Christian Kouamé y Liberato Cacace. Cuando invierte en el proceso ofensivo, normalmente lo hace por la banda derecha, aprovechando la profundidad ofrecida por Emmanuel Gyasi. Están fuera de este juego Liam Henderson, Nicolas Haas, Youssef Maleh, Szymon Żurkowski, Ardian Ismajli, Saba Sazonov y Pietro Pellegri, todos con problemas físicos.