Después de 16 victorias, 9 empates y 8 derrotas, el equipo visitante está en la 3ª posición, habiendo conseguido 57 puntos. En la última partida, empató con el St. Pauli en casa por (2‑2), después de que en el partido anterior también empatara fuera contra el FSV Mainz 05 por (1‑1). Este es un equipo influenciado positivamente por el factor local, siendo más fuerte cuando juega con el respaldo de sus aficionados, ya que en los últimos 30 juegos registra 4 victorias, 5 empates y 6 derrotas como visitante, con un total de 18 goles anotados y 23 recibidos. En casa, ha logrado 8 victorias, 2 empates y 5 derrotas, con un total de 29 goles marcados y 17 encajados. En sus últimos 10 partidos fuera en el campeonato, el Frankfurt suma 3 victorias, 4 empates y 3 derrotas, obteniendo 13 puntos de 30 posibles. En sus juegos ligueros como visitante, el resultado más frecuente al descanso ha sido 0‑1 (7 de 16 partidos). Su ataque ha anotado con regularidad en el último tiempo, anotando en 8 de los últimos 10 partidos de esta competición. De los 33 partidos en esta competición, solo logró revertir el marcador en 1 de los 10 encuentros en los que recibió el primer gol.
El Eintracht Frankfurt llega a este encuentro tras un empate 2-2 frente al FC St. Pauli, con goles firmados por Michy Batshuayi y Rasmus Kristensen. Para este enfrentamiento, el club dirigido por Dino Toppmöller debería mantener su habitual esquema táctico en 3-4-3, con Jean-Mattéo Bahoya, Ansgar Knauff y Hugo Ekitiké formando el tridente ofensivo. La estrategia pasará por explotar preferentemente el flanco derecho, donde Rasmus Kristensen se destaca por su profundidad y su capacidad para desequilibrar con sus incursiones ofensivas. Quedan fuera de este partido Junior Dina Ebimbe, Krisztián Lisztes, Kauã Santos y Mario Götze, todos con problemas físicos.