Después de 1 victoria, 1 empate y 5 derrotas, el equipo local ocupa la 19ª posición, habiendo conseguido 4 puntos. En su último partido, perdió ante el Grêmio como visitante (1‑0), después de haber perdido en casa con el Bragantino (1‑2). Este es un equipo que se beneficia del factor local, siendo más fuerte ante su afición, ya que en los últimos 30 partidos registra 3 victorias, 2 empates y 10 derrotas como visitante, con 17 goles marcados y 21 sufridos, frente a 9 victorias, 3 empates y 3 derrotas en casa, con 28 goles marcados y 15 recibidos. En sus últimos 10 partidos como local, Santos ha registrado 5 victorias, 3 empates y 2 derrotas. La solidez defensiva no ha sido su punto fuerte, ya que ha encajado goles en 6 de los últimos 7 partidos, pero su ataque ha mostrado regularidad, anotando en 5 de los últimos 7 partidos en esta competencia. En 15 partidos, ha recibido el primer gol 7 veces y nunca ha logrado revertir el marcador.
La situación del Santos en la Serie B es crítica, ocupando el penúltimo lugar y presionado por una serie de tropiezos. Al jugar en casa, el equipo ve este duelo como una obligación de victoria para mantener viva la esperanza de recuperación. La inestabilidad defensiva y la falta de creatividad en ataque son sus mayores obstáculos. El club necesita presentar un fútbol más organizado y competitivo, especialmente frente a adversarios mejor posicionados. El factor local puede ser un aliado importante, pero el ambiente también podría volverse hostil en caso de otra decepción. La urgencia por sumar puntos y la presión de la afición hacen de este enfrentamiento algo decisivo para el futuro en la competencia.