Este es un equipo afectado por el factor casa, más fuerte cuando juega en casa, ya que en los últimos 30 partidos registra 4 victorias, 2 empates y 9 derrotas como visitante, con 14 goles marcados y 20 sufridos, contra 7 victorias, 6 empates y 2 derrotas en casa, con 29 goles marcados y 24 sufridos. El equipo llega a este partido después de un empate en casa con el Bragantino por (2‑2), para el Brasileirão Série A. En los últimos 10 partidos disputados en casa el Vasco registra 5 victorias, 3 empates y 2 derrotas.
Para esta competición, registra una secuencia de 4 empates en sus últimos partidos y no perdió ninguno de los últimos 5 partidos. El equipo permitió goles a su rival en 4 de los últimos 5 partidos, por lo que no ha mostrado gran solidez defensiva, pero su ataque ha marcado con regularidad, ya que marcó goles en 4 de los últimos 5 partidos para esta competición. En 15 partidos, sólo consiguió remontar el marcador una vez en los 9 partidos en los que sufrió el primer gol.
Vasco llega al segundo partido de los octavos de final de la Copa de Brasil con un empate fuera de casa. El equipo de Río mostró una buena actuación en el primer partido, logrando un resultado que mantiene todo abierto para el partido de vuelta en São Januário. El equipo Cruz-Maltino sabe que jugar ante su afición es una ventaja importante y espera aprovechar esta ventaja para buscar la clasificación. La estrategia debe ser mantener la solidez defensiva y aprovechar las oportunidades de contraataque para garantizar la victoria. Las expectativas son altas y el Vasco tiene presión para confirmar su favoritismo y avanzar en la competición.