El equipo visitante juega su primer partido en esta edición de la Europa League con la intención de lograr un resultado positivo como visitante. Este es un equipo que curiosamente ha sido más fuerte fuera que en casa, ya que en los últimos 30 partidos ha registrado 9 victorias, 3 empates y 3 derrotas como visitante; contra 9 victorias, 2 empates y 4 derrotas en su estadio. En el último partido que jugó, en el Landsbankadeild Karla, perdió con el KR en casa por (3-4). En los últimos 10 partidos como visitante el Breidablik ganó 5, empató 2 y perdió 3. La solidez defensiva no ha sido su punto fuerte, habiendo encajado goles en 8 de los últimos 10 partidos, pero su ataque ha marcado con regularidad, ya que marcó goles en 9 de los últimos 10 juegos. En 15 partidos, encajó 6 veces el primer gol y solo consiguió 1 remontada en el marcador. Hay 1 periodos en destaque en los últimos 20 partidos fuera de casa para todas las competiciones: recibió 10 de sus 26 goles entre los minutos (31’‑45′).
Breidablik llega a este partido con una derrota, por 3-4, ante Reykjavik, puntuable para el campeonato de Islandia. Cabe señalar que los visitantes llegan a esta fase de la Europa League tras la eliminación ante Copenhague en la 2ª jornada de la Champions League. La selección islandesa suele jugar en un 4-4-2, donde los tres jugadores más adelantados son Jason Dadi Svanthórsson, Kristinn Steindórsson y Viktor Karl Einarsson. El cerebro del equipo es el centrocampista Gísli Eyjólfsson, el jugador encargado de definir y dirigir los ataques de su equipo. Todos los jugadores están disponibles para este juego.