El equipo visitante se encuentra actualmente en la 10ª posición, con 9 puntos conquistados, después de 2 victorias, 3 empates y 9 derrotas. En el penúltimo partido, empató fuera con el Nõmme Kalju por (1‑1). En el último partido, ganó en casa frente al Vaprus por (2‑1). Este es un equipo más fuerte en casa, donde conquistó 8 puntos, frente a sólo 1 en sus partidos fuera de casa. En los últimos 7 partidos como visitante para el campeonato el Nõmme Utd registra 1 empate y 6 derrotas, por lo que conquistó 1 punto en 21 posibles.
En esta competición, no gana como visitante hace 7 partidos. La solidez defensiva no ha sido su punto fuerte, ya que sufrió al menos un gol en cada uno de los últimos 10 partidos para esta competición. Hay una tendencia para haber goles en sus partidos como visitante, ya que 35 de los últimos 38 partidos que disputó terminaron con Más de 1,5 goles. Al equipo le ha costado mucho marcar primero. De hecho, sólo han abierto el marcador una vez en sus últimos 14 partidos de Meistriliiga. En 14 partidos en esta competición, sufrió el primer gol 12 veces y sólo consiguió la remontada una vez.
Nõmme United ocupa el décimo y último lugar de la tabla y afronta una temporada desafiante. Con dificultades para obtener victorias y puntos, el equipo se encuentra en la parte inferior de la tabla, luchando por salir de la zona de descenso. El equipo necesita un cambio de rumbo en sus actuaciones para tener posibilidades de permanecer en la primera división. El choque contra Kuressaare es una oportunidad imprescindible para iniciar esta recuperación. El Nõmme United necesita mostrar una mejora significativa en todos los sectores del campo, desde la defensa hasta el ataque, para lograr un resultado positivo. El equipo es consciente de la importancia de este juego y debe entrar en campo con la mentalidad decidida a cambiar su destino esta temporada.