El equipo de la casa se encuentra actualmente en la 1ª posición, con 10 puntos conquistados, después de 4 victorias y 1 empate. En el penúltimo partido, ganó en casa frente a Israel por (4‑1). En el último partido, ganó fuera frente a la Bélgica por (0‑1). En los últimos 10 partidos en casa Italia registra 7 victorias, 2 empates y 1 derrota.
En esta competición no pierde hace 5 partidos. La solidez defensiva no ha sido su punto fuerte, ya que sufrió goles en 4 de los últimos 5 partidos, pero su ataque ha marcado con regularidad, ya que marcó al menos un gol en cada uno de los últimos 5 partidos para esta competición. En sus partidos en casa hay una tendencia para haber goles, ya que 8 de sus últimos 10 partidos terminaron con Más de 2,5 goles. En 15 partidos, consiguió la remontada en 2 de los 5 partidos en los que sufrió el primer gol. En los últimos 10 partidos en casa para todas las competiciones hay 1 periodo en destaque: sufrió 4 de sus 10 goles entre los minutos (31’‑45′).
Italia llega a este partido motivada, después de una victoria por 0-1 en la visita al estadio de Bélgica: el único gol del partido lo marcó Sandro Tonali. El equipo local suele actuar en un sistema táctico 3-5-2, privilegiando las transiciones rápidas, principalmente a través de las bandas. En este dibujo táctico, los dos hombres responsables de sembrar el pánico en la defensa rival son Mateo Retegui y Moise Kean. El centrocampista Sandro Tonali es el jugador responsable por guiar de la mejor manera el juego ofensivo de su equipo y tiene una visión de juego muy por encima de la media de su equipo. Todos los atletas están disponibles para este juego.