Después de 9 victorias, 11 empates y 17 derrotas, el equipo visitante está en la 17.ª posición, con 38 puntos conquistados. En el último partido, perdió en casa con el Flamengo por (0‑3). En el partido anterior, perdió en casa, en un partido contra el Corinthians, por (2‑4). Este es un equipo afectado por el factor casa, más fuerte cuando juega con el apoyo de su afición, ya que en los últimos 30 partidos registra 3 victorias, 2 empates y 10 derrotas como visitante, con un total de 13 goles marcados y 25 concedidos. En casa, obtuvo 5 victorias, 6 empates y 4 derrotas, con un total de 16 goles marcados y 17 sufridos. Para el campeonato, el Criciúma conquistó 8 puntos en 30 posibles, después de 2 victorias, 2 empates y 6 derrotas en los últimos 10 partidos que disputó como visitante. La solidez defensiva no ha sido su punto fuerte, ya que sufrió goles en 8 de los últimos 10 partidos para esta competición. En sus partidos fuera de casa suele haber goles, ya que 12 de sus últimos 18 partidos en la competición acabaron con Más de 2,5 goles. En 37 partidos en esta competición, sufrió el primer gol 16 veces y sólo consiguió la remontada una vez. En los últimos 18 partidos como visitante para esta competición hay 1 periodo en destaque: marcó 7 de sus 19 goles entre los minutos (76’‑90′).
Con el descenso ya confirmado, Criciúma entra al campo sólo para cumplir con el calendario, pero busca finalizar su participación de manera digna. Sin la misma presión del rival, el equipo puede sentirse más ligero para explorar contraataques e intentar sorprender. A pesar de una campaña marcada por las fluctuaciones, el equipo todavía pretende mostrar competitividad y hacerle la vida difícil a su rival. Jugar sin responsabilidad directa puede ser una ventaja, pero la falta de ambición en el campeonato también puede limitar el impulso del partido.