Después de 20 victorias, 5 empates y 4 derrotas, el equipo de la casa está en la 2ª posición, con 64 puntos conquistados. En el último partido, empató fuera con el Manchester City por (0‑0), después de haber ganado en casa en el partido anterior, en un partido contra el Brentford, por (2‑1). Este es un equipo afectado por el factor casa, más fuerte cuando juega en casa, ya que en los últimos 30 partidos registra 7 victorias, 3 empates y 5 derrotas como visitante, con 30 goles marcados y 15 sufridos, contra 12 victorias, 1 empate y 2 derrotas en casa, con 38 goles marcados y 11 sufridos. En los últimos 10 partidos en casa para el campeonato, el Arsenal registra 9 victorias y 1 derrota, por lo que conquistó 27 puntos en 30 posibles. Su ataque ha marcado con regularidad, ya que marcó goles en 9 de los últimos 10 partidos para esta competición. En sus partidos en casa hay una tendencia para haber goles, ya que 11 de sus últimos 14 partidos en la competición terminaron con Más de 2,5 goles. Este es un equipo que suele marcar primero: abrió el marcador en 22 de sus últimos 29 partidos en la Premier League, de esos 22 llegó al descanso en ventaja en 11 y logró mantener la ventaja hasta el final de los 90' en 19. En 29 partidos en esta competición, sufrió el primer gol 6 veces y sólo logró darle la vuelta al marcador una vez.
El Arsenal entra en esta ronda después de un empate por 0x0 en la visita al Manchester City. El equipo de la casa suele actuar en un 4-3-3, privilegiando las transiciones ofensivas y canalizando su ataque a través de los flancos. Las tres flechas apuntadas a la portería enemiga serán Leandro Trossard, Buakyo Saka y Kai Havertz, siendo el responsable por definir el sector ofensivo el centrocampista Martin Odegaard. Para este partido, el técnico Mikel Arteta no puede contar con Jurrien Timber, por problemas físicos.