El equipo de la casa se encuentra actualmente en la 6ª posición, con 33 puntos conquistados, después de 8 victorias, 9 empates y 4 derrotas. En el penúltimo partido, perdió fuera frente al Cagliari por (2‑1). En el último partido, empató fuera frente al Milán por (2‑2). Este es un equipo más fuerte cuando juega en casa, ya que en los últimos 30 partidos registra 2 victorias, 9 empates y 4 derrotas como visitante; contra 9 victorias, 5 empates y 1 derrota en su estadio. Para el campeonato, el Bolonia conquistó 23 puntos en 30 posibles, después de 7 victorias, 2 empates y 1 derrota en los últimos 10 partidos que disputó en su estadio.
En esta competición no perdió ninguno de los últimos 9 partidos en su estadio. En los partidos disputados en su estadio para la liga, el resultado más frecuente al final de los primeros 45' fue el 0‑0 (4 en 10 partidos). El equipo permitió goles al rival en 7 de los últimos 10 partidos, por lo que no ha mostrado gran solidez defensiva, pero su ataque ha marcado con regularidad, ya que marcó goles en 9 de los últimos 10 partidos en esta competición. En sus partidos en casa hay una tendencia para haber pocos goles, ya que 7 de sus últimos 10 partidos en la competición terminaron con Menos de 2,5 goles. En 21 partidos disputados en esta competición, sólo consiguió la remontada una vez en los 6 partidos en los que sufrió el primer gol. Hay 1 periodo en destaque en los últimos 10 partidos en casa para esta competición: marcó 5 de sus 14 goles entre los minutos (76'‑90').
El Bolonia llega a este partido tras un empate fuera de casa, por 2-2, frente al Milán. El Bolonia es un equipo al que le gusta jugar en su mediocampo, con el objetivo de intentar sorprender al rival mediante el contraataque. En esta formación, los tres hombres cuya principal función será “invadir” la zaga rival son Kacper Urbanski, Joshua Zirkzee y Giovanni Fabbian. Para este partido, el técnico local no deberá poder contar con Dan Ndoye y Adama Soumaoro, ya que, en este momento, están entregados al departamento médico.