Después de 8 victorias, 5 empates y 9 derrotas, el equipo de la casa está en la 7.ª posición, con 29 puntos conquistados. En el último partido, ganó fuera al FC Köln por (0‑1), después de haber perdido en el partido anterior en casa, en un partido contra el Heidenheim, por (1‑2). Este es un equipo afectado por el factor casa, más fuerte cuando juega en casa, ya que en los últimos 30 partidos registra 4 victorias, 3 empates y 8 derrotas como visitante, con 17 goles marcados y 25 sufridos, contra 7 victorias, 3 empates y 5 derrotas en casa, con 31 goles marcados y 25 encajados. En los últimos 10 partidos en casa para el campeonato el Bremen registra 5 victorias, 2 empates y 3 derrotas, por lo que conquistó 17 puntos en 30 posibles. En los partidos disputados en su estadio para la liga, el resultado más frecuente al final de los primeros 45' fue el 1‑0 (4 en 11 partidos). Su ataque ha marcado con regularidad, ya que marcó goles en 9 de los últimos 10 partidos para esta competición. Hay una tendencia para haber goles en sus partidos en casa, ya que 11 de los últimos 11 partidos que disputó para esta competición terminaron con Más de 1,5 goles. En 22 partidos disputados en esta competición, sólo consiguió la remontada una vez en los 12 partidos en los que sufrió el primer gol.
El Werder Bremen llega a este partido tras una victoria por 0-1 en la visita al Colonia, sumando así la cuarta victoria en los últimos cinco partidos disputados en la Bundesliga: el único gol del equipo lo marcó Justin Njinmah. El club local deberá actuar en un sistema táctico 3-5-2, con el objetivo de intentar aprovechar los contraataques. En esta formación, los dos hombres que jugarán un papel más ofensivo deberían ser Marvin Ducksch y Nick Woltemade. En cualquier caso, se espera que este equipo local adopte una postura más ofensiva, teniendo en cuenta que tiene una plantilla con más calidad. Están fuera de este partido Milos Veljkovic, Amos Pieper, Jiri Pavlenka, Niklas Stark, Leon Opitz y Naby Keïta, todos con problemas físicos.