El equipo de la casa llega a esta fase de la Copa del Rey (Cuartos de final) después de haber eliminado al Valencia, después de una victoria fuera por (1‑3) en la eliminatoria anterior. Este es un equipo poco afectado por el factor casa, es decir, presenta resultados similares en casa y fuera, ya que en los últimos 30 partidos registra 5 victorias, 4 empates y 6 derrotas como visitante, con 26 goles marcados y 23 encajados, contra 5 victorias, 5 empates y 5 derrotas en casa, con 17 goles marcados y 16 encajados. El equipo llega a este partido después de una derrota en casa con la Real Sociedad por (0‑1). El Celta de Vigo ha ganado 2, empatado 4 y perdido 4 de sus últimos 10 partidos en casa para todas las competiciones.
En esta competición, registra una secuencia de 4 victorias en los últimos partidos. El equipo permitió goles a su rival en 3 de los últimos 4 partidos, por lo que no ha mostrado gran solidez defensiva, pero su ataque ha marcado con gran regularidad, ya que siempre marcó al menos un gol en los últimos 4 partidos en esta competición. . En 15 partidos, sufrió el primer gol 5 veces y sólo consiguió darle la vuelta al marcador una vez.
El Celta de Vigo llega a este partido tras una derrota en casa, por 0-1, ante la Real Sociedad, en un partido de La Liga. Cabe señalar que el equipo local eliminó al Valencia en la última ronda de la Copa del Rey. El club local suele actuar en un sistema táctico 4-4-2, privilegiando las transiciones rápidas, principalmente a través de las bandas. En este diseño, los dos mediadores encargados de provocar miedo en la defensa “enemiga” son Iago Aspas y Jorgen Strand Larsen. Cuando se adentra en el sector ofensivo suele optar por intentar canalizar su ataque por el lado izquierdo, aprovechando la velocidad que ofrece el lateral Manuel Sánchez. Fuera de este partido están Franco Cervi, Joseph Aidoo, Mihailo Ristic y Carl Starfelt, todos con problemas físicos.