El equipo visitante se encuentra actualmente en la 16ª posición, con 27 puntos conquistados, después de 9 victorias, 8 empates y 14 derrotas. En el penúltimo partido, empató fuera con el Newcastle United por (1‑1). En el último partido, ganó en casa frente al Burnley por (1‑0). Curiosamente, este es un equipo que ha conseguido mejores resultados fuera de casa que en casa, ya que conquistó 19 puntos como visitante y sólo 16 en casa. Para el campeonato, el Everton conquistó 9 puntos en 30 posibles, después de 2 victorias, 3 empates y 5 derrotas en los últimos 10 partidos que disputó como visitante.
Para esta competición, no ganó ninguno de los últimos 8 partidos como visitante. En los partidos disputados como visitante para el campeonato, el resultado más frecuente al final de los primeros 45' fue el 0‑0 (7 en 15 partidos). El equipo permitió goles al rival en 8 de los últimos 10 partidos, por lo que no ha mostrado gran solidez defensiva, pero su ataque ha marcado con regularidad, ya que marcó goles en 7 de los últimos 10 partidos para esta competición. En 31 partidos en esta competición, sufrió el primer gol 15 veces y nunca logró la remontada.
El Everton llega a este partido tras una derrota en casa, por 1-0, ante el Burnley, sumando el segundo partido consecutivo sin perder en esta Premier League: el único gol del equipo lo marcó Dominic Calvert-Lewin. El equipo visitante suele actuar en un sistema táctico 4-3-3, privilegiando las transiciones rápidas, principalmente a través de las bandas, siendo los tres hombres más adelantados Jack Harrison, Dwight McNeil y Dominic Calvert-Lewin: el último atleta mencionado es uno de los los máximos goleadores del equipo, con 5 goles marcados. Cuando invierte en el sector ofensivo, suele hacerlo por el pasillo derecho, aprovechando la profundidad que ofrece el lateral Seamus Coleman. Fuera de este partido están Dele Alli, Lewis Dobbin y James Garner, todos con problemas físicos.