Después de 12 victorias, 9 empates y 15 derrotas, el equipo de la casa está en la 15.ª posición, con 37 puntos conquistados. En el último partido, empató fuera con el Luton Town por (1‑1), después de haber ganado en casa en el partido anterior, en un partido contra el Brentford, por (1‑0). Éste es un equipo más fuerte cuando juega en casa, ya que en los últimos 30 partidos registra 4 victorias, 5 empates y 6 derrotas como visitante; contra 7 victorias, 4 empates y 4 derrotas en su estadio. En los últimos 10 partidos en casa para el campeonato el Everton registra 5 victorias, 3 empates y 2 derrotas, por lo que conquistó 18 puntos en 30 posibles.
En esta competición, registra una secuencia de 4 victorias en sus últimos partidos en casa. En los partidos disputados en su estadio para la liga, el resultado más frecuente al final de los primeros 45' fue el 0‑0 (9 en 18 partidos). Su ataque ha marcado con regularidad, ya que marcó goles en 8 de los últimos 10 partidos para esta competición. En sus partidos en casa para esta competición hay una tendencia para pocos goles, ya que en 11 de los últimos 18 que disputó hubo menos de 3 goles. En 36 partidos en esta competición, sufrió el primer gol 16 veces y nunca logró la remontada.
El Everton llega a este partido tras un empate a uno en la visita al Luton Town, sumando el cuarto partido consecutivo sin perder en esta competición: el único gol del equipo lo marcó Dominic Calvert-Lewin. El equipo de la casa suele actuar en un sistema táctico 4-3-3, privilegiando las transiciones rápidas, principalmente a través de las bandas. Cabe señalar que en esta formación, los tres hombres más avanzados, responsables de causar pánico en la defensa contraria, son Dominic Calvert-Lewin, Dwight McNeil y Jack Harrison. Fuera de este partido están Dele Alli, Nathan Patterson y Vitaliy Mykolenko, todos con problemas físicos.