El equipo de la casa se encuentra actualmente en la 6ª posición, con 27 puntos conquistados, después de 8 victorias, 3 empates y 6 derrotas. En el penúltimo partido, ganó en casa frente al Cagliari por (2‑1). En el último partido, perdió fuera frente a la Roma por (2‑0). Este es un equipo que suele conseguir resultados más positivos como visitante que en casa, ya que conquistó 17 puntos fuera de casa, donde marcó 16 goles y sufrió 8, y 10 puntos en casa, con 12 goles marcados y 13 sufridos. En los últimos 8 partidos en casa para el campeonato el Napoli registra 3 victorias, 1 empate y 4 derrotas, por lo que conquistó 10 puntos en 24 posibles. El equipo ha permitido goles a su rival en 9 de los últimos 10 partidos que disputó en esta competición, por lo que no ha sido muy fuerte defensivamente. En sus partidos en casa para la competición hay una tendencia para haber goles, ya que 6 de 8 terminaron con Más de 2,5 goles en el marcador. En 17 partidos disputados en esta competición, sólo consiguió la remontada una vez en los 9 partidos en los que sufrió el primer gol. Hay 1 periodo en destaque en los últimos 15 partidos en casa para todas las competiciones: marcó 8 de sus 22 goles entre los minutos (61’‑75′).
El equipo dirigido por Walter Mazzarri llega a este partido desmotivado, tras una derrota fuera de casa, por 2-0, en el estadio de la Roma. El equipo local suele actuar en un 4-3-3, privilegiando un estilo de juego más rápido, siendo los tres jugadores más adelantados Khvicha Kvaratskhelia, Victor Osimhen y Matteo Politano. El jugador que debe tener la misión de servir de la mejor manera a los delanteros es el polaco Piotr Zielinski. Al parecer, el técnico del Napoli no debería poder contar con Eljif Elmas, Stanislav Lobotka, Mathías Olivera y Natan, ya que actualmente se encuentran en el departamento médico.