El equipo de la casa disputa su primer partido en esta edición de la Copa FA con la intención de aprovechar el factor casa para conquistar un resultado positivo. Este es un equipo afectado por el factor casa, más fuerte cuando juega en casa, ya que en los últimos 30 partidos registra 2 victorias, 2 empates y 11 derrotas como visitante, con 7 goles marcados y 23 sufridos, contra 5 victorias, 4 empates y 6 derrotas en casa, con 17 goles marcados y 20 encajados. El equipo llega a este partido después de una victoria en casa con el Hull City por (3‑1). El Sheff Wed ha ganado 4, empatado 3 y perdido 3 de sus últimos 10 partidos en casa para todas las competiciones. El equipo permitió goles a su rival en 8 de los últimos 10 partidos, por lo que su defensa necesita mejorar, pero su ataque ha marcado con regularidad, ya que marcó goles en 9 de los últimos 10 partidos. En 15 partidos, sólo consiguió la remontada en 1 de los 8 partidos en los que sufrió el primer gol.
El equipo de Sheffield Wednesday llega a este partido tras una victoria por 3-1 ante el Hull City, en un partido que cuenta para la segunda división inglesa: los goles del equipo fueron marcados por Marvin Johnson, Djeidi Gassama y Josh Windass. El club local juega en un sistema táctico 4-3-3, privilegiando un fútbol más ofensivo, colocando a muchos jugadores en la zona más central del campo. En esta formación, los tres hombres más adelantados, responsables de poner en peligro la defensa enemiga, deberán ser Anthony Musaba, Bailey Cadamarteri y Djeidi Gassama. Fuera de este juego están Will Vaulks, Akin Famewo, Callum Paterson, Dominic Iorfa, Momo Diaby y Mallik Wilks, todos con problemas físicos.