El equipo de la casa debuta en esta edición de la Liga Europa con la intención de conquistar un resultado positivo, aprovechando el factor casa. Este es un equipo afectado por el factor casa, más fuerte cuando juega ante su afición, ya que en los últimos 30 partidos registra 3 victorias, 7 empates y 5 derrotas como visitante, con 19 goles marcados y 23 sufridos, contra 8 victorias, 2 empates y 5 derrotas en casa, con 23 goles marcados y 18 sufridos. El equipo llega a este partido después de una victoria en casa con el Hutnik Cracovia por (3‑0). El Wisła ha ganado 5 y perdido 5 de sus últimos 10 partidos en casa para todas las competiciones. La solidez defensiva no ha sido su punto fuerte, ya que sufrió goles en 9 de los últimos 10 partidos, pero su ataque ha marcado con regularidad, ya que marcó goles en 8 de los últimos 10 partidos.
El Wisla Kraków llega a este partido tras una victoria por 3-0 en un amistoso frente al Hutnik Kraków. Cabe señalar que el equipo de la casa llega a esta primera fase de la Liga Europa, como resultado del título de la Copa de Polonia 2023/2024. El equipo local suele actuar en un sistema táctico 4-3-3, privilegiando las transiciones rápidas, principalmente a través de las bandas. En este dibujo, los tres hombres responsables de causar pánico en la defensa rival son Ángel Baena, Mateusz Mlynski y Ángel Rodado. El responsable por definir y liderar los ataques de su equipo es el centrocampista Marc Carbó, un jugador con una capacidad envidiable para ver el juego. Fuera de este partido están Igor Lasicki, Bartosz Talar y Jakub Stepak, todos con problemas físicos.
