Tras 12 victorias, 9 empates y 7 derrotas, el equipo visitante ocupa la 5ª posición con 45 puntos. En su último encuentro, venció al TSG Hoffenheim por 3-1 en casa, después de haber perdido fuera ante el Borussia Mönchengladbach por 1-0 en el partido anterior. Este equipo se ve afectado por el factor local, ya que rinde mejor con el apoyo de sus aficionados, con un historial de 2 victorias, 4 empates y 9 derrotas en sus últimos 30 partidos como visitantes (15 goles marcados y 25 recibidos). Como local, ha logrado 9 victorias, 3 empates y 3 derrotas, anotando un total de 31 goles y recibiendo 21. En la competición, el RB Leipzig ha conseguido 7 puntos de 30 posibles, con 1 victoria, 4 empates y 5 derrotas en sus últimos 10 partidos como visitante.
Para esta competición, no ha ganado ninguno de los últimos 7 partidos fuera de su estadio. En sus encuentros fuera, el resultado más frecuente al final de los primeros 45′ ha sido 0-0, que se ha dado en 6 de sus 14 partidos. En sus encuentros como visitante, hay una tendencia hacia pocos goles, ya que 6 de sus últimos 14 partidos en la competencia terminaron con menos de 1.5 goles. En 28 partidos de esta competición, logró revertir el marcador en 3 de los 9 encuentros en los que recibió el primer gol.
El RB Leipzig llega a este encuentro tras una victoria por 3-1 sobre el TSG 1899 Hoffenheim: los goles fueron anotados por Benjamin Sesko, Ridle Baku y Yussuf Poulsen. El equipo visitante probablemente jugará en un sistema tático 4-4-2, buscando aprovechar los contraataques. En este esquema, los dos jugadores que desempeñarán un rol más ofensivo serán Loïs Openda y Benjamin Sesko. Al atacar, el equipo suele priorizar el flanco derecho, donde Ridle Baku destaca por su velocidad. Están fuera de este juego Xaver Schlager, Antonio Nusa, Assan Ouédraogo y Benjamin Henrichs, todos lesionados.