El equipo local ocupa actualmente la 7ª posición, con 41 puntos tras 9 victorias, 14 empates y 6 derrotas. En su penúltimo encuentro, ganó en casa ante el Dunkerque por (2‑0). En su último partido, obtuvo un empate fuera contra el Annecy por (1‑1). Este equipo se ve beneficiado por el factor campo, siendo más fuerte cuando juega frente a su afición, ya que en sus últimas 30 actividades ha registrado 3 victorias, 6 empates y 6 derrotas como visitante, con 15 goles a favor y 19 en contra, en contraste con 8 victorias, 6 empates y solo 1 derrota en casa, donde ha anotado 26 goles y recibido 9.
En el campeonato, no conoce la derrota en su estadio desde hace 14 partidos. En encuentros disputados como local, el resultado más frecuente al finalizar los primeros 45 minutos ha sido el 0‑0, resultado que se ha presentado en 6 de sus 14 partidos. Su ataque tiene un ritmo regular, ya que ha marcado en 8 de los últimos 10 partidos del torneo. Sin embargo, sus juegos en casa suelen tener escasos goles, dado que 6 de sus últimas 14 presentaciones en la competencia terminaron con menos de 1.5 goles. En 29 partidos de esta competición, solo ha logrado remontar en 2 ocasiones en los 11 encuentros en los que recibió el primer gol.
A pesar de algunas fluctuaciones recientes, el Bastia mantiene una campaña competitiva y sólida en la Ligue 2, especialmente como local. Tiende a imponer su juego en casa, apostando por un estilo físico e intenso que le permite controlar el ritmo del juego. No obstante, debe mejorar su consistencia a lo largo de los 90 minutos para evitar sorpresas. Para aspirar a algo más grande esta temporada, es fundamental mantener una racha positiva frente a su afición. Enfrentando a un rival directo, el Bastia debería adoptar una estrategia más agresiva desde el principio, con el objetivo de abrir una ventaja lo antes posible, aprovechando la ventaja de jugar en casa.