El equipo visitante ocupa actualmente la 1ª posición, con 88 puntos logrados, gracias a 24 victorias, 16 empates y 2 derrotas. En su penúltimo partido, empató fuera contra el Derby County por (0‑0). En su último encuentro, ganó en casa al Norwich City por (2‑1). Este es un equipo poco afectado por el factor casa, mostrando resultados similares en casa y fuera, ya que en los últimos 30 juegos registra 9 victorias, 5 empates y 1 derrota como visitante, con 20 goles marcados y 7 encajados. En casa, ha obtenido 9 victorias y 6 empates, anotando un total de 21 goles y encajando solo 4.
En esta competición, no ha perdido ninguno de sus últimos 14 juegos fuera de su estadio. En sus partidos de liga como visitante, el resultado más frecuente al Intervalo fue el 0‑0 (9 de 21 partidos). Su ataque ha marcado con regularidad, concretando en 8 de los últimos 10 juegos en esta competición. En sus partidos como visitante, se observa una tendencia a pocos goles, ya que 16 de los últimos 21 juegos en la competición terminaron con menos de 2.5 goles. En 42 partidos en esta competición, pudo revertir el marcador en 3 de los 8 juegos en los que recibió el primer gol.
El Burnley llega a este enfrentamiento tras una victoria por 2-1 en casa ante el Norwich, donde los goles fueron anotados por Hannibal y Jaidon Anthony. El equipo visitante adopta un sistema táctico 4-3-3, buscando un estilo de juego ofensivo con presión alta. En esta formación, los jugadores clave que generan peligro en el área rival son Marcus Edwards, Zian Flemming y Jaidon Anthony. Al avanzar en el proceso ofensivo, el equipo tiende a canalizar el ataque por el lado derecho, aprovechando la profundidad que ofrece Connor Roberts. No estarán disponibles para este partido Jordan Beyer, Bashir Humphreys, Mike Trésor, Jonjo Shelvey, Enock Agyei y Lyle Foster, todos lesionados.