Después de 4 victorias, 5 empates y 24 derrotas, el equipo local se encuentra en la 18ª posición, con 7 puntos obtenidos. En su último partido, perdió contra Pumas UNAM por (2-0) como visitante, después de haber caído en casa frente a Querétaro por (1-2). Esta es una plantilla que se siente más fuerte cuando juega en casa, ya que en los últimos 30 partidos ha registrado 2 empates y 13 derrotas como visitante, con 12 goles a favor y 34 en contra, mientras que en casa tiene 4 victorias, 3 empates y 8 derrotas, anotando 15 goles y permitiendo 23. En el campeonato, Santos Laguna ha acumulado 8 puntos de 30 posibles, logrando 2 victorias, 2 empates y 6 derrotas en sus últimos 10 partidos en casa. El equipo ha permitido goles a su oponente en 9 de sus últimos 10 encuentros, lo que demuestra una falta de solidez defensiva, aunque su ataque ha tenido un buen desempeño, anotando en 7 de los últimos 10 partidos. Además, es un equipo que tiende a no marcar primero, habiendo abierto el marcador en solo 8 de sus últimos 33 juegos de la Liga MX. De esos 8, al medio tiempo iba en ventaja en 5 y al final del partido logró ganar en solo 2 ocasiones. En 33 partidos de este torneo, solo ha conseguido dar vuelta al marcador en 2 de los 24 juegos donde recibió el primer gol. Un dato significativo es que marcó 6 de sus 15 goles en los minutos (76′-90′) durante sus últimos 16 partidos como local.
El Santos Laguna llega a este encuentro sin chances de avanzar en el torneo, luego de una campaña llena de fallos e inestabilidad. No ha podido mostrar un fútbol competitivo durante el Clausura y ahora se presenta solo para cumplir con el calendario. A pesar de no tener grandes aspiraciones, en casa intentará completar su participación con dignidad y tratar de agradar a su afición. Se espera que su actuación sea más relajada, sin la presión de un resultado específico, lo que podría favorecer una actitud más libre. Sin embargo, la falta de motivación podría afectar la intensidad del equipo.