Después de 11 victorias, 8 empates y 11 derrotas, el equipo local está en la 11ª posición, habiendo acumulado 41 puntos. En su último partido, empató 4-4 contra el FC Union Berlín, tras haber perdido en casa contra el Werder Bremen (1‑2). Curiosamente, este equipo ha sido más fuerte fuera de casa que en su propio estadio, registrando en los últimos 30 juegos 7 victorias, 5 empates y 3 derrotas como visitante, en comparación con 7 victorias, 1 empate y 7 derrotas en casa. En los últimos 10 partidos en casa por la liga, Stuttgart ha obtenido 4 victorias y 6 derrotas, sumando 12 puntos de 30 posibles.
En esta competición, ha perdido los últimos 5 partidos disputados en su estadio. Los resultados más frecuentes al medio tiempo en sus partidos de liga como local han sido 0‑1 (6 de 15 partidos). Han permitido goles a sus oponentes en 9 de los últimos 10 juegos, lo que indica que no han mostrado gran solidez defensiva, aunque su ataque ha sido regular, anotando en 9 de los últimos 10 partidos en esta competición. En sus juegos en casa, aparece la tendencia de que hay goles, ya que 12 de los últimos 15 partidos de la competición terminaron con más de 2.5 goles. En 30 partidos en esta competición, recibieron el primer gol 12 veces y solo lograron revertir el marcador en 2 ocasiones.
Stuttgart llega a este partido después de igualar 4-4 en la visita al estadio del Union Berlín: los goles del equipo fueron marcados por Deniz Undav, Enzo Millot, Jeff Chabot y Chris Führich. El entrenador, Sebastian Hoeneß, deberá mantener su habitual sistema táctico en 4-3-3, apostando por un enfoque veloz y dinámico. En el ataque, Deniz Undav, Chris Führich y Enzo Millot son las principales armas ofensivas, mientras que Maximilian Mittelstädt proporcionará profundidad y amplitud por la banda izquierda. Para este encuentro, el técnico no podrá contar con Dan-Axel Zagadou, Nikolas Nartey, Josha Vagnoman, Jamie Leweling, El Bilal Touré, Justin Diehl, Luca Raimund y Anrie Chase, todos en el departamento médico.
