Hasta llegar a esta fase de la Copa del Rey (Final), el equipo tuvo que eliminar a: Atlético de Madrid, Valencia, Real Betis y Barbastro. El equipo llega a este encuentro después de una victoria ante el Mallorca por (1-0). En los últimos 5 partidos disputados en la Copa del Rey, el Barcelona ganó 4 y empató 1.
En esta competición, no ha perdido ninguno de los últimos 5 partidos disputados. Su ataque ha marcado con gran regularidad, ya que ha logrado marcar al menos un gol en los últimos 5 partidos en esta competición. En sus encuentros existe una tendencia hacia los goles, ya que en 52 de sus últimos 61 partidos hubo Más de 1.5 goles y en 46 de los últimos 61 hubo Más de 2.5 goles. El equipo no suele tener dificultades para abrir el marcador: logró anotar el primer gol en 12 de los últimos 15 partidos, de esos 12 llegó al descanso con ventaja en 6 y consiguió mantener la ventaja hasta el final de los 90’ en 11.
El Barcelona entra a esta final de la Copa del Rey con una victoria reciente por 1-0 contra el Mallorca, en el partido correspondiente a la última jornada de La Liga. Los catalanes aseguraron su presencia en esta final tras eliminar al Atlético de Madrid en la fase anterior, en un recorrido marcado por la eficacia ofensiva a lo largo de las rondas. Bajo la dirección técnica de Hansi Flick, el equipo blaugrana alineará un 4-3-3, manteniendo su identidad basada en un juego equilibrado y compacto, con transiciones rápidas por los flancos. El trío ofensivo estará formado por Ferran Torres, Lamine Yamal y Raphinha, mientras que Pedri asumirá el papel de maestro en el mediocampo, siendo el principal responsable de articular las jugadas ofensivas. No estarán disponibles para este juego Alejandro Balde, Marc-André ter Stegen, Robert Lewandowski, Marc Casadó y Marc Bernal, todos lesionados.