Después de 1 victoria, 3 empates y 3 derrotas, el equipo visitante ocupa la 15ª posición, con 6 puntos. En su último partido, empató 0-0 con Volta Redonda en casa, tras haber perdido, en el partido anterior, 2-1 contra Chapecoense. Curiosamente, esta es una plantilla que ha sido más fuerte fuera que en casa, ya que en sus últimos 30 encuentros tiene 5 victorias, 4 empates y 6 derrotas como visitante; en comparación con 4 victorias, 6 empates y 5 derrotas en su estadio. En los últimos 10 partidos como visitante, Criciúma ha ganado 5, empatado 3 y perdido 2. La solidez defensiva no ha sido su punto fuerte, ya que ha recibido goles en 5 de los últimos 7 encuentros, pero su ataque ha sido regular, marcando en 6 de los últimos 7 partidos en esta competencia.
Criciúma está pasando por una fase complicada y está muy cerca de la zona de descenso, con solo una victoria en la competencia hasta ahora. Las actuaciones por debajo de lo esperado impactan directamente en su campaña, y el equipo necesita reaccionar lo más pronto posible para evitar mayores complicaciones. Jugar fuera de casa contra un rival presionado no será fácil, pero una buena actuación puede cambiar el ambiente interno. Para poder marcar, será esencial presentar un fútbol más organizado y equilibrado, minimizando errores en las decisiones. El momento exige superación y total concentración en el campo.