Después de 3 victorias, 3 empates y 4 derrotas, el equipo visitante ocupa la 12ª posición, con 12 puntos. En su último partido, ganó al Bahia en casa por (1‑0), después de haber perdido fuera contra São Paulo por (2‑1) en la jornada anterior. Este es un equipo afectado por el factor casa, ya que ha conseguido 1 punto como visitante y 11 en su estadio, con 6 goles anotados y 5 sufridos en casa, frente a 3 goles anotados y 9 sufridos como visitante. El equipo llega a este partido después de una victoria en casa contra Sportivo Luqueño por (1‑0). En el campeonato, Grêmio ha conseguido 1 punto de 12 posibles, tras 1 empate y 3 derrotas en sus últimos 4 partidos como visitante.
En esta competición, no gana como visitante desde hace 4 partidos. El equipo ha permitido goles al adversario en 8 de los últimos 10 partidos, por lo que no ha mostrado gran solidez defensiva, pero su ataque ha marcado con regularidad, ya que ha logrado concretar en 8 de los últimos 10 partidos en esta competición. Existen 1 períodos destacados en los últimos 20 partidos disputados como visitante en todas las competiciones: ha sufrido 11 de sus 29 goles entre los minutos (76’‑90′).
Grêmio finalmente volvió a ganar en la competición, resultado que trajo un poco de alivio tras una racha negativa, pero la situación del equipo aún exige cautela. El club sigue cerca de la parte baja de la tabla y sabe que necesita encadenar buenos resultados para respirar con más tranquilidad. El enfrentamiento fuera de casa, en Caxias do Sul, impone dificultades adicionales, exigiendo máxima concentración y disciplina táctica. El equipo necesita mantener la solidez mostrada en la última jornada y evitar errores que puedan costar puntos preciosos. La meta es clara: conquistar otra victoria y alejarse de la zona peligrosa de la clasificación.