El equipo local llega a esta etapa de la Europa League (octavas de la final) después de una victoria en casa por (5‑2), después de la extensión, y una derrota de (2‑1) con FC Twente. Este es un equipo más fuerte cuando juega en su estadio, ya que en los últimos 30 juegos registra 4 victorias, 5 sorteos y 6 derrotas como visitante; Contra 11 victorias, 1 empate y 3 pérdidas en su estadio. En los últimos 5 juegos en casa para los registros de Bodø/Glimt de la Europa League 4 victorias y 1 derrota. La solidez defensiva no ha sido su punto fuerte, ya que ha concedido goles en 9 de los últimos 10 juegos, pero su ataque ha marcado regularmente, ya que ha marcado goles en 9 de los últimos 10 juegos en esta competencia. En sus juegos en casa hay una tendencia a tener goles, ya que 24 de sus últimos 27 juegos han terminado con más de 1.5 goles y 22 en 27 han terminado con más de 2.5 goles. Este es un equipo que obtiene unas pocas veces primero y que solo logró abrir el anotador en 2 de sus últimos 10 juegos por la Europa League, y nunca alcanzó el descanso en ventaja. En 10 juegos en esta competencia, logró obtener el puntaje en 4 de los 7 juegos en los que concedieron el primer gol.
Bodo/Glimt llega a este partido después de una victoria, en extensión, 5-2. Frente al Twente, en un juego válido para el segundo tramo de los play-offs de acceso a esta fase de la Europa League: los goles del equipo fueron estampados por Kasper Høgh, Brice Wembangomo, Sandre Brunstad Fet, Mees Hilgers y Arno Verschueren, los últimos dos en el objetivo en sí. El equipo local generalmente actúa en un sistema táctico en 4-3-3, dando más importancia a un estilo de juego de transiciones constantes. En este dibujo, los tres hombres responsables de lanzar el pánico en la defensa opuesta son Sandre Sørli, Kasper Høgh y Jens Petter Hauge. Es de destacar que el hombre que tendrá la misión de guiar el juego ofensivo de su equipo es el mediocampista Ulrik Saltnes. Fuera de este juego está Gaute Vetti debido a problemas físicos.
