Después de 11 victorias, 8 empates y 15 derrotas, el equipo visitante se sitúa en la 12ª posición, habiendo conseguido 41 puntos. En su último partido, empató con el Bologna en casa por (0‑0), después de haber perdido en la jornada anterior ante el Torino, en un partido que terminó (2‑0). Este es un equipo poco afectado por el factor casa, exhibiendo resultados similares en casa y fuera, ya que en los últimos 30 partidos registra 3 victorias, 4 empates y 8 derrotas como visitante, con un total de 13 goles marcados y 22 recibidos. En casa, logró sumar 5 victorias, 3 empates y 7 derrotas, con un total de 16 goles marcados y 21 encajados. En los últimos 10 encuentros fuera de casa en el campeonato, Udinese ha registrado 3 victorias, 3 empates y 4 derrotas, acumulando 12 puntos de 30 posibles. En 34 partidos de esta competición, recibió el primer gol 16 veces y solo logró 2 remontadas.
El equipo del Udinese entra en esta jornada tras un empate sin goles, 0-0, ante el Bologna. A diferencia de su rival en este encuentro, el equipo visitante juega con un sistema clásico 5-4-1, teniendo a Keinan Davis como principal referencia ofensiva. Su proceso ofensivo pasa frecuentemente por el corredor izquierdo, donde el lateral Hassane Kamara ofrece profundidad. Para este encuentro, el equipo no contará con Martín Payero y Kingsley Ehizibue, ambos suspendidos, ni con Florian Thauvin, Isaak Touré y Lorenzo Lucca, que están lesionados.
