El equipo visitante está actualmente en 13ª posición, con 39 puntos, tras 9 victorias, 13 empates y 11 derrotas. En la penúltima jornada, empató sin goles contra el Hellas Verona. En su último partido, perdió en casa frente a la Lazio (0‑2). Este equipo también se beneficia del factor casa, siendo más fuerte cuando juega ante su afición, ya que en los últimos 30 partidos registra 3 victorias, 5 empates y 7 derrotas como visitante, con un total de 10 goles a favor y 20 en contra. En casa, ha logrado 5 victorias, 6 empates y 4 derrotas, anotando 16 goles y encajando otros 16. En sus últimos 10 partidos fuera en la competición, el Genoa ha registrado 1 victoria, 6 empates y 3 derrotas, obteniendo 9 puntos de 30 posibles.
En esta competición, no gana como visitante desde hace 8 partidos. En los encuentros disputados fuera en la competición, el resultado más frecuente al final de los primeros 45′ ha sido 0‑0, que se ha dado en 7 de sus 17 partidos. El equipo ha permitido goles al rival en 7 de los últimos 10 partidos de esta competición, por lo que no ha estado muy fuerte defensivamente. Hay una tendencia a que en sus partidos fuera haya pocos goles, ya que 11 de sus últimos 16 partidos en la competición terminaron con menos de 2.5 goles. En 33 partidos en esta competición, nunca logró darle la vuelta al marcador en los 19 partidos en que recibió el primer gol.
El Genoa llega a este enfrentamiento tras una derrota por 0-2 ante la Lazio. El club visitante suele jugar en un sistema táctico 4-4-2, privilegiando transiciones rápidas, especialmente a través de las bandas. En este esquema, los dos delanteros encargados de crear peligros son Vitinha y Andrea Pinamonti. Cuando el club visitante opta por el ataque, generalmente utiliza el costado izquierdo, aprovechando la profundidad que ofrece Aaron Martín. No podrá contar con Sebastián Otoa, quien está suspendido, así como Mario Balotelli, Caleb Ekuban, Ruslan Malínoxkyi, Fabio Miretti, Jean Onana, Hugo Cuenca, Maxwel Cornet y Alan Matturro, que están lesionados.