Después de 4 victorias, 10 empates y 23 derrotas, el equipo local está en la 18ª posición, habiendo conseguido 22 puntos. En la última partida, perdió contra el Leicester City por 2-0, después de haber perdido en casa contra el Brentford por 0-1 en el partido anterior. Curiosamente, este equipo presenta mejores resultados fuera de casa, registrando 3 victorias, 5 empates y 7 derrotas como visitante, con 19 goles marcados y 26 recibidos, en comparación con 2 victorias, 2 empates y 11 derrotas en casa, donde ha marcado 13 goles y concedido 34. En la liga, el Ipswich ha acumulado solo 3 puntos de 30 posibles en sus últimos 10 juegos en casa, con 1 victoria y 9 derrotas.
En esta competición, ha perdido los últimos 8 partidos disputados en su estadio. Defensivamente, el equipo no ha estado sólido, ya que ha concedido goles en los últimos 10 partidos de esta competición. Se le ha presentado una tendencia a los goles en sus partidos en casa, ya que 16 de los últimos 18 encuentros han terminado con más de 1.5 goles. En 37 juegos en esta competición, han sufrido el primer gol 21 veces y nunca lograron cambiar el marcador.
El Ipswich Town llega a esta jornada desmotivado tras la derrota por 2-0 en el estadio del Leicester. El club local suele jugar con un sistema táctico 4-3-3, privilegiando un estilo más dinámico y de rápidas transiciones. En este esquema, los delanteros Jack Clarke, Omari Hutchinson y Liam Delap son los encargados de hacer daño a la defensa rival. En el mediocampo, deberían estar Jens Cajuste, Sam Morsy y Julio Enciso. El entrenador Kieran McKenna no podrá contar con Arijanet Muric, Nathan Broadhead, Chiedozie Ogbene, Jaden Philogene y Wes Burns debido a lesiones en este momento.