Tras 14 victorias, 7 empates y 8 derrotas, el equipo visitante ocupa la 7ª posición en la tabla con un total de 49 puntos. En su más reciente partido, ganó al Cagliari en casa por 1-0, luego de haber derrotado al Empoli de visitante por 0-1 en la jornada anterior. Este equipo es más fuerte en su propia cancha, ya que en los últimos 30 juegos, tiene un registro de 4 victorias, 5 empates y 6 derrotas de visitante; mientras que en su estadio ha logrado 12 victorias, 1 empate y 2 derrotas. En los últimos 10 partidos fuera de casa, la Roma registra 4 victorias, 2 empates y 4 derrotas, obteniendo un total de 14 puntos de 30 posibles.
En esta competencia, ganó sus últimos 4 encuentros como visitante. El resultado más frecuente al final de los primeros 45′ ha sido 0-0, que ocurrió en 7 de sus 15 juegos. Su ataque ha sido constante, anotando al menos un gol en cada uno de sus últimos 10 partidos en esta liga. En las competiciones externas, tiende a haber pocos goles, ya que 10 de sus últimos 14 partidos terminaron con menos de 2.5 goles. En 29 partidos de esta competencia, ha permitido el primer gol en 13 ocasiones y solo ha logrado 3 remontadas en el marcador.
La Roma llega a este enfrentamiento tras una victoria de 1-0 sobre el Cagliari, donde el único gol fue anotado por Artem Dovbyk. El club romano usualmente juega con un sistema táctico 3-4-3, centrando su estilo de juego en un ataque ofensivo, con transiciones rápidas y aprovechamiento de las jugadas a balón parado. Los jugadores más influyentes en la ofensiva son Artem Dovbyk, Matías Soulé y Tommaso Baldanzi. Al atacar, el equipo tiende a explorar preferentemente su flanco derecho, aprovechando las proyecciones del lateral Alexis Saelemaekers. No podrán contar con Zeki Çelik, Anass Salah-Eddine y Paulo Dybala, quienes están fuera por problemas físicos.