Después de 5 victorias, 11 empates y 20 derrotas, el equipo local ocupa la 21ª posición, habiendo alcanzado 26 puntos. En su último partido, ganó al Eldense en casa por (1-0), después de haber perdido en el partido anterior fuera, contra el Real Oviedo por (3-0). Curiosamente, este equipo ha tenido resultados más positivos de visitante que de local, ya que en los últimos 30 partidos registra 4 victorias, 2 empates y 9 derrotas como visitante, con 11 goles marcados y 28 encajados, contra 2 victorias, 5 empates y 8 derrotas en casa, con 8 goles a favor y 21 en contra. En sus últimos 10 partidos en casa en la liga, Racing Ferrol ha registrado 1 victoria, 3 empates y 6 derrotas, logrando 6 puntos de 30 posibles. En los encuentros en su estadio, el resultado más común al final del primer tiempo fue el 0-0, que se dio en 9 de sus 18 partidos. La solidez defensiva no ha sido su punto fuerte, ya que ha encajado goles en 8 de los últimos 10 partidos, y su ataque no está en buena forma, ya que no marcó en 8 de los últimos 10 partidos en esta competición. En casa, tiende a haber pocos goles, ya que en 12 de sus últimos 18 partidos se dieron menos de 3 goles. Este es un equipo que marca poco primero y que solo logró hacerlo en 6 de sus últimos 36 partidos en la Liga Adelante; de esos 6, llegó al descanso en ventaja en 3 y ganó en 5. En 36 partidos de competición, nunca logró revertir el marcador en los 22 partidos en los que recibió el primer gol. En los últimos 18 partidos en casa en esta competición, 9 de sus 25 goles fueron encajados entre los minutos (76′-90′).
El Racing de Ferrol no tiene escapatoria del descenso, pero sigue marcando goles, a pesar de haber perdido fuera de casa contra el Almería en la última jornada por 2-1, con su gol anotado por Álvaro Giménez. Apostando en un esquema 4-2-3-1, el equipo centra su poder ofensivo en Eneko Jaurengi, un delantero que se destaca en las finalizaciones, aprovechando cualquier oportunidad que se le presente. En la creación, Josué Dorrio, Aitor Gelardo y Josep Señé asumen protagonismo, controlando el juego con inteligencia y conectando los sectores mediante toques precisos y constante movimiento. Se espera que el entrenador cuente con todos los jugadores disponibles para el próximo compromiso.