La escuadra visitante se encuentra en el 15° lugar, con 9 puntos obtenidos, tras 2 victorias, 3 empates y 3 derrotas. En su penúltimo encuentro, ganó 1-0 al Santos como local. En su último partido, empató 1-1 con el Bragantino en casa. Este es un equipo más fuerte en su estadio, ya que en los últimos 30 partidos ha registrado 3 victorias, 7 empates y 5 derrotas como visitante; en comparación con 8 victorias, 4 empates y 3 derrotas en casa. El equipo llegó a este partido después de un empate en casa con el Godoy Cruz (1-1). En sus últimos 10 partidos fuera de casa en todas las competiciones, el Grêmio ha ganado 3, empatado 4 y perdido 3. El equipo permitió goles al adversario en 7 de los últimos 8 partidos, lo que indica una falta de solidez defensiva, pero su ataque ha sido regular, anotando en 6 de los últimos 8 partidos en esta liga. En los últimos 20 partidos fuera de casa, hay 2 períodos destacados: anotó 8 de sus 22 goles entre los minutos (76’‑90′); y recibió 10 de sus 28 goles en el mismo periodo.
Por otro lado, el Grêmio llega golpeado después de dejar escapar una gran victoria en la liga. El equipo estaba adelantado ante el RB Bragantino hasta los minutos finales, cuando nuevamente cometió errores cruciales en su defensa. Ahora, necesitados de recuperar los puntos perdidos, es crucial que, lejos de Porto Alegre, demuestren mayor concentración en el campo, especialmente en su línea defensiva. Rectificar esta postura será un paso importante para aumentar las posibilidades de sorprender a un São Paulo que ha mostrado buenos números en casa.