El equipo visitante disputa su segundo partido en el Grupo C, después de ganar (7‑0) en su primer partido en esta fase de grupos, frente a la RP China. Este es un equipo que mantiene su rendimiento cuando juega fuera de casa, ya que en los últimos 30 partidos registra 11 victorias y 4 derrotas como visitante; contra 13 victorias, 1 empate y 1 derrota en su estadio. En los últimos 8 partidos fuera de casa en todas las competiciones, Japón ganó 6 y perdió 2.
En esta competición ganó los últimos 7 partidos que disputó. El equipo ha mostrado gran solidez defensiva, ya que no sufrió ningún gol en los últimos 7 partidos, y su ataque ha marcado con gran regularidad, ya que siempre marcó al menos un gol en los últimos 7 partidos para esta competición. En sus partidos fuera de casa suele haber goles, ya que 8 de sus últimos 8 partidos acabaron con Más de 2,5 goles.
La selección de Japón llega a este partido después de una gran victoria por 7-0 contra China: los goles del equipo fueron marcados por Wataru Endo, Kaoru Mitoma, Takumi Minamino (2), Junya Ito, Daizen Maeda y Takefusa Kubo. El equipo visitante suele actuar en un sistema táctico 3-4-3, privilegiando las transiciones rápidas, principalmente a través de las bandas. En esta formación, los tres hombres responsables de causar pánico en la defensa contraria son Ayase Ueda, Takumi Minamino y Kaoru Mitoma. Cabe señalar que el hombre que será el responsable de liderar y definir las jugadas de ataque de su país es el centrocampista Takefusa Kubo. Todos los atletas están disponibles para este juego.
