Después de 2 victorias, 2 empates y 3 derrotas, el equipo local se encuentra en la 13ª posición, con 8 puntos en su haber. En el último partido, ganó al Santos en casa por (1‑0), después de haber empatado en el encuentro anterior contra el Vitória, también fuera, por (1‑1). Este equipo se ve beneficiado por el factor local, siendo más fuerte cuando juega ante su afición, ya que en los últimos 30 partidos tiene 3 victorias, 7 empates y 5 derrotas como visitante, con 18 goles a favor y 22 en contra, en comparación a sus 9 victorias, 3 empates y 3 derrotas en casa, anotando 30 goles y concediendo 15. En su último juego, que fue para la Copa Bridgestone Sudamericana, empató con el Atlético Grau fuera por (0‑0). En los últimos 4 juegos en casa por el campeonato, Grêmio ha registrado 2 victorias, 1 empate y 1 derrota, habiendo conseguido 7 puntos de 12 posibles. El equipo ha permitido goles a su oponente en 6 de sus últimos 7 juegos, por lo que no ha mostrado gran solidez defensiva, pero su ataque ha sido regular, anotando en 5 de sus últimos 7 juegos en esta competición. En 15 partidos, sufrió el primer gol en 7 ocasiones y solo logró una remontada. Hay 1 período destacado en sus últimas 20 partidos disputados en casa en todas las competiciones: marcó 14 de sus 39 goles entre los minutos (31’‑45’).
La victoria por un estrecho 1 a 0 trajo un alivio positivo para Grêmio en este momento del Brasileirão. El equipo aún necesita ofrecer actuaciones más sólidas, pero tiene muchas expectativas en el trabajo de su nuevo entrenador. Al borde del campo, Mano Menezes tendrá mucho trabajo para ajustar su equipo antes de otro desafío en la Arena, esta vez contra RB Bragantino, que llega a esta ronda con un excelente historial reciente como visitante.
