Hasta llegar a esta fase de la Copa de Italia (Semifinales), el equipo visitante eliminó a la Lazio y a la Udinese. El Inter llega a este encuentro tras una victoria en casa contra la Udinese por (2‑1). En sus últimos 10 partidos disputados fuera de casa en todas las competiciones, el Inter ha ganado 6, empatado 2 y perdido 2. Su ataque ha marcado con regularidad, anotando en 9 de sus últimos 10 partidos. En 15 partidos, recibió el primer gol en 4 ocasiones y solo logró una remontada en el marcador. En sus últimos 20 encuentros fuera de casa para todas las competiciones, hay un periodo que resalta: sufrió 6 de sus 12 goles entre los minutos (76’‑90′).
El Inter de Milán llega a este enfrentamiento tras un triunfo por 2-1 en su duelo frente a la Udinese, correspondiente a la Serie A. Es importante destacar que los visitantes alcanzan esta etapa de la Copa de Italia tras eliminar a la Lazio en la ronda anterior. El equipo visitante tiende a jugar en un sistema táctico 3-5-2, favoreciendo transiciones más rápidas, principalmente a través de las bandas. En este esquema, los dos hombres encargados de causar pánico en la defensa rival son Marko Arnautovic y Marcus Thuram. Al momento de avanzar en el proceso ofensivo, el equipo tiende a explotar preferentemente el flanco izquierdo, aprovechando las subidas del lateral Federico Dimarco. Quedaron fuera de este partido Kristjan Asllani, por sanción, además de Lautaro Martínez, Denzel Dumfries, Piotr Zieliński y Valentín Carboni, estos últimos por lesiones.
