Después de 11 victorias, 11 empates y 8 derrotas, el equipo visitante ocupa la 3ª posición, habiendo alcanzado 26 puntos. En su último partido, perdió en casa frente a Pumas UNAM (1‑2), y en el encuentro anterior también perdió fuera, ante Necaxa (2‑1). Esta es una escuadra que apenas ha sido afectada por el factor local, es decir, suman prácticamente los mismos puntos en casa que de visita, con 19 goles anotados y 12 recibidos en su estadio, frente a 23 goles anotados y 27 recibidos como visitantes. En la liga, León ha acumulado 17 puntos de 30 posibles, con 5 victorias, 2 empates y 3 derrotas en sus últimos 10 partidos como visitantes. En los partidos disputados fuera, el resultado más frecuencia al final de los primeros 45’ ha sido el 1‑1, que se ha visto en 6 de sus 15 encuentros. La solidez defensiva no ha sido su punto fuerte, ya que han recibido goles en 9 de los últimos 10 partidos, pero su ataque ha mantenido regularidad, anotando al menos un gol en cada uno de sus últimos 10 partidos en esta competencia. En los partidos disputados como visitantes hay una tendencia a los goles, ya que 13 de 15 han culminado con más de 2.5 goles en el marcador. En 30 partidos en esta competencia, han sufrido el primer gol 9 veces y solo han conseguido una remontada en el marcador.
León es consciente de la importancia de mantener una regularidad de victorias en esta fase del Clausura, especialmente para seguir compitiendo por el liderato de la tabla. El equipo no puede permitirse perder más puntos importantes. Tras un rendimiento reciente por debajo de las expectativas como visitante, será esencial ajustar ciertos detalles tácticos para lograr un buen resultado contra el Querétaro, que ha demostrado ser fuerte en casa.