Después de 3 victorias, 4 empates y 8 derrotas, el equipo visitante está en la 7ª posición, con 8 puntos conquistados. En el último partido, perdió fuera frente al KuPS por (3‑1). En el partido anterior, perdió en casa, en un partido contra el EIF, por (1‑2). Este es un equipo más fuerte cuando juega en casa, ya que en los últimos 30 partidos registra 2 victorias, 6 empates y 7 derrotas como visitante; contra 5 victorias, 5 empates y 5 derrotas en su estadio. Para el campeonato, el Gnistan conquistó 6 puntos en 24 posibles, después de 1 victoria, 3 empates y 4 derrotas en los últimos 8 partidos que disputó como visitante.
Para esta competición, no ganó ninguno de los últimos 7 partidos como visitante. El equipo permitió goles al rival en 9 de los últimos 10 partidos para esta competición, por lo que no ha estado muy fuerte defensivamente. Este es un equipo que rara vez marca primero y sólo consiguió abrir el marcador en 3 de sus últimos 15 partidos en Veikkausliiga, de esos 3 llegó al descanso en ventaja en 1 y ganó al final de los 90' en 1. En 15 partidos disputados en esta competición, sólo consiguió la remontada dos veces en los 11 partidos en los que sufrió el primer gol.
Gnistan afronta una temporada complicada en la Veikkausliiga. El equipo está en la parte inferior de la tabla, luchando por evitar el descenso. La actuación reciente de Gnistan ha estado marcada por una serie de derrotas y empates, lo que les dificulta ascender en la clasificación. La defensa ha mostrado debilidades, sufriendo muchos goles, mientras el ataque, aunque creando oportunidades, no ha sido eficaz a la hora de finalizar. La necesidad de puntos es urgente para Gnistan, que necesita ajustar sus estrategias y mejorar su rendimiento tanto defensiva como ofensivamente. La resiliencia y la capacidad de luchar hasta el final serán cruciales para que el equipo permanezca en la Veikkausliiga.