El equipo visitante llega a esta fase de la Major League Soccer (Regular Season) después de haber eliminado al Orlando City, con una derrota por (0‑3) en casa en la jornada anterior. Este es un equipo más fuerte cuando juega en casa, ya que en los últimos 30 partidos registra 3 victorias, 4 empates y 8 derrotas como visitante; contra 5 victorias, 6 empates y 4 derrotas en su estadio. En sus últimos 10 partidos como visitante para el campeonato el Nashville registra 2 victorias, 2 empates y 6 derrotas, por lo que conquistó 8 puntos en 30 posibles.
En esta competición perdió los últimos 5 partidos que disputó. En los partidos disputados fuera de casa por el campeonato, el resultado más frecuente al final de los primeros 45' fue el 0‑0 (4 en 13 partidos). La solidez defensiva no ha sido su punto fuerte, ya que sufrió goles en 7 de los últimos 10 partidos, pero su ataque ha marcado con regularidad, ya que marcó goles en 7 de los últimos 10 partidos para esta competición. En 24 partidos en esta competición, sufrió el primer gol 10 veces y sólo consiguió la remontada una vez. En los últimos 11 partidos como visitante para esta competición hay 2 periodos en destaque: marcó 3 de sus 8 goles entre los minutos (16'‑30') y 3 de sus 8 entre (76'‑90').
A pesar de su pobre historial reciente como visitante en la MLS, el Nashville sabe que es capaz de sorprender en este duelo. El equipo se enfrentará a un rival que viene oscilando mucho, lo que podría ser decisivo en el campo. El cuerpo técnico deberá enviar al campo a un equipo muy competitivo, centrado en la victoria desde el pitido inicial.