Después de 11 victorias, 9 empates y 16 derrotas, el equipo local está en la 17ª posición, habiendo conquistado 42 puntos. En el último partido, ganó al Leeds United en casa por (1-0), después de haber perdido en el juego anterior fuera contra el Luton Town por (1-0). Este es un equipo que se ve afectado por el factor casa, siendo más fuerte cuando juega delante de sus aficionados, ya que en los últimos 30 partidos registra 2 victorias, 2 empates y 11 derrotas como visitante, con 10 goles marcados y 30 recibidos, contra 9 victorias, 4 empates y 2 derrotas en casa, con 26 goles marcados y 10 recibidos. En los últimos 10 juegos en casa de la liga, el Portsmouth registra 7 victorias, 2 empates y 1 derrota, habiendo conquistado 23 puntos de 30 posibles. En las partidas disputadas en su estadio en la liga, el resultado más frecuente al final de los primeros 45′ fue el 0-0, que se ha verificado en 7 de sus 18 partidos. El equipo ha permitido goles a su oponente en 7 de los últimos 10 partidos, por lo que no ha mostrado mucha solidez defensiva, pero su ataque ha sido efectivo, ya que ha logrado concretar en 7 de los últimos 10 partidos de esta competición. En 36 juegos de esta disputa, sufrió el primer gol 18 veces y solo logró 3 remontadas en el marcador.
El equipo del Portsmouth llega a este juego con una victoria, por 1-0, ante el Leeds: el único gol del encuentro fue anotado por Colby Bishop. El equipo local apuesta por un sistema táctico 4-3-3, privilegiando transiciones rápidas y explotando los flancos para amenazar la portería rival. En este esquema, el trío ofensivo formará parte de Matt Ritchie, Josh Murphy y Colby Bishop, quienes tendrán la responsabilidad de crear desequilibrios en el ataque. Están fuera de este partido Callum Lang, Ibane Bowat, Jacob Farrell, Paddy Lane, Jordan Williams, Conor Shaughnessy y Rob Atkinson, todos con problemas físicos.